Toda Valencia, sus instituciones, sus gobernantes y sus prohombres deberían ser custodios y protectores de ese milagro vivo de San Vicente Ferrer que es el Colegio Imperial de Niños Huérfanois de San Vicente Ferrer, creado en 1410.
El Capítulo de Caballeros Jurados es un ferviente admirador de la meritísima labor que a lo largo de estos séis siglos y venciendo todos los obstáculos, viene realizando esta institución vicentina protectora de los niños valencianos más desvalidos.
Nuestros visitantes de Vannes debían conocerlo y los Caballeros Jurados los llevamos allí. El Padre Llópez, Medalla de Oro del Capítulo, les enseñó con gran afecto las instalaciones.
Más debiéramos hacer por el Colegio Imperial los Caballeros Jurados, porque ese es nuestro anhelo, nuestra vocación y nuestro deber. Y algo hemos hecho por el Colegio Imperial en estos últimos años:
1980. El Capitulo organiza una peregrinación a Vannes. El obispo auxiliar de Valencia D. Jesús Pla Gandía, el Director del Colegio Imperial D. José Castillo Peiró y el Lloctinent General del Capitulo traen a Valencia el hueso radio del brazo derecho de San Vicente Ferrer.
1990. Entrega y bendición de una imagen de San Vicente Ferrer obra de D. Octavio Vicent Cortina, para que presida los patios del Colegio Imperial de Niños Huérfanos de San Vicente Ferrer.
2012. Entrega al Colegio Imperial del "Proyecto de arbolado y ajardinamiento" para sus aéreas de juego.
2012. El Capítulo promueve la preparación del terreno y la plantación del arbolado y el Jardín Bíblico para el Colegio Imperial.
2013. El Capitulo entrega al Colegio Imperial materiales docentes digitales exclusivos para la formación en áreas de botánica, jardinería y viverística.