calixtoiiiHoy, hace 559 años, el Papa valenciano Calixto III canonizaba a su paisano Fray Vicente Ferrer Miquel, el fraile de la Orden de Predicadores que, siendo él todavía un niño, predijo que sería Papa y que sería el que lo canonizase.

La historia la refiere, entre otros, el cronista dominico Pietro Ranzano -quien se encontraba en Roma cuando fue elegido papa Calixto III- en su opúsculo De vita et gestis Sancti Vincentii Ferrerii Confessoris, escrito antes de 1463, narra cómo una vez que predicaba el santo dominico en Valencia, estando presente entre la multitud el joven Alfonso de Borja, se dirigió a él y le dijo: "Te felicito, hijo, pues debes saber que serás máximo ornato de tu patria y de tu familia. Obtendrás la mayor dignidad entre los mortales, y a mí, una vez difunto, me colocarás en grandísima y altísima veneración. Mientras tanto, procura perseverar en tus estudios". Confiando en este vaticinio el anciano cardenal de Borja había revelado a sus íntimos que llegaría un día en que presidiría la Iglesia Romana, y lo mismo aseguraba a la muerte de cada papa, provocando la burla de quienes le oían, que tomaban sus palabras por ridículos delirios de senectud. Mas cuando el vaticinio se cumplió a la muerte de Nicolás V, le preguntaron inspirado por qué numen u oráculo había predicho esto desde tanto tiempo antes y con tanta constancia, a lo cual respondió el anciano pontífice narrando lo anterior y asegurando que guardó siempre en su memoria estas palabras, sin olvidarlas nunca. De modo que, una vez cumplido lo que le había predicho de él, sólo quedaba cumplir lo que quedaba de la profecía, canonizando al dominico.